Brahim Díaz se está erigiendo como el líder del AC Milan en este final de temporada. El malagueño ha agarrado las riendas del conjunto de Stefano Pioli desde la mediapunta, siendo el elemento diferencial dentro del terreno de juego.

Gracias a su brillante rendimiento individual, los rosoneri han alcanzado las semifinales de final de la UEFA Champions League. Hito histórico tras más de 10 años sin lograrlo.

A todo esto, su nombre está sonando como posible refuerzo para el Real Madrid de cara la próxima temporada, ya que finaliza su cesión en el conjunto de Lombardía.

Una vez contextualizado el análisis, desde MBP School of Coaches vamos a destacar qué perfil de futbolista es Brahim Díaz, y cómo impacta su conducta táctica en el equipo milanista.

¿Qué perfil de jugador es Brahim Díaz?

El malagueño es un perfil de media punta llegador. El futbolista acostumbra a actuar en la zona de 3/4 del ataque, con una alta tendencia tanto de adentrarse en espacios de finalización, como de ayudar en la construcción del juego en los momentos de inicio dinámico y progresión.

Ahondando en las estructuras del jugador, la primera que resalta es la cognitiva. Brahim dispone de una excelente toma de decisión. Gracias a ello, el rosoneri consigue optar por la mejor opción, indistintamente de la situación del juego que se esté produciendo.

Asimismo, este aspecto cobra especial redundancia, ya que, en un deporte como el fútbol donde no ocurre nunca la misma situación, el hecho de tener la habilidad de entender el juego, y saber cuál es la respuesta óptima a realizar, es vital.

Otra de las grandes virtudes de Brahim, es su estructura coordinativa. El n.º 10 posee una gran habilidad con el balón en los pies. El mediapunta dispone de un magnífico pase, ya sea corto o largo, un fantástico regate con las dos piernas, y un brillante disparo desde corta y media distancia.

Por último, otra de las aptitudes del ex del Real Madrid, es su estructura socio-afectiva. Gracias a su conducta colectiva dentro del terreno de juego, el futbolista aumenta el número de participaciones de sus compañeros, consiguiendo en muchas ocasiones hacer mejores a los jugadores que le rodean y favorecer el estilo de juego que quiere imponer su entrenador.

¿Qué fundamentos del juego domina Brahim Díaz?

El primer fundamento a destacar hace referencia a la habilidad del jugador de “ofrecer apoyo entre línea de medios y defensa adversaria”. A través de su ubicación en los intervalos, ya sean estos intralineales o interlineales, el rosoneri consigue condicionar la actitud defensiva del rival, o recibir en espacios “libres” de marca con el suficiente espacio/tiempo para poder ejecutar la acción posterior con más probabilidades de éxito.

Asimismo, a través de la ejecución del fundamento, el jugador permite a su equipo disponer de más líneas de pase en una zona del campo muy compleja.

Otro de los principales comportamientos tácticos más recurrentes por el jugador, es el de buscar un juego en progresión vertical en ataque en el último tercio, además de tener en cuenta el riesgo/beneficio de la acción.

Una vez logra recibir libre de marca en la zona de 3/4, Brahim Díaz busca verticalizar los ataques de su equipo, priorizando la siguiente secuencia: pase en profundidad a un compañero con posibilidad de finalización, conducción de balón para fijar y liberar, o finalmente, liberar a carril lateral para mantener la posesión de balón.

Asimismo, cuando esté prioriza realizar pases en progresión al compañero, el rosonesi sabe ajustar a la perfección el timing entre el desmarque, y el pase. Gracias a ello, el pasador, es decir, Brahim, no entorpece la carrera de su compañero, no realizándole un pase una vez está situado en una posición antirreglamentaria o en situación de desventaja.

Finalmente, desde MBP School of coaches también queremos resaltar la habilidad que tiene el futbolista para “atacar al defensor en situaciones de 1vs1 con ventaja espacial”. A pesar de no ser un jugador especialmente rápido, el joven atacante posee una potencia espectacular en su tronco inferior. Por ello, es realmente difícil pararle en los primeros metros de arrancada.

Además, este aspecto sumado a su habilidad coordinativa con balón ya mencionada, hace que Brahim sea muy peligroso en situaciones de ventaja espacial contra su par. Sobre todo durante la  la fase de transición, en la que el rival se encuentra desorganizado y puede aprovechar para generar situaciones de peligro.

Conclusión

Brahim Díaz parece haber llegado a su madurez como futbolista profesional. Tras dos temporadas cedido en el AC Milán por parte del Real Madrid, el internacional español se ha convertido en el líder rosoneri gracias a su brillante rendimiento.