La selección Española de fútbol perdió ayer frente a Italia en semifinales de la EURO 2020. Tras un apasionante encuentro, el partido se decidió en la tanda de penaltis, donde esta vez, la suerte no cayó de cara el equipo de Luis Enrique.
El técnico español volvió a mostrar su gran capacidad táctica, y sorprendió a todos con la inclusión de un “falso 9″ en el once inicial, en detrimento de Álvaro Morata, formando un tridente ofensivo por Oyarzábal, Dani Olmo y Ferran Torres.
Por parte de Italia, Roberto Mancini solo dio entrada en el once titular a Emerson en substitución del lesionado Spinazzola, lo que no supuso ninguna modificación a nivel estructural y el técnico italiano y siguió manteniendo el famoso P-4-3-3 como estructura base.
Una vez contextualizado el análisis, nos focalizaremos en 4 puntos claves: quien fue el MBP del encuentro, cuál fue la clave táctica, qué entrenador tuvo un mayor impacto en su equipo durante el partido y cómo fueron los goles.
Análisis táctico
El Jugador MBP:
El “MBP” del encuentro fue Dani Olmo. El jugador del Red Bull Leipzig vio exponenciada su participación durante el encuentro, gracias al rol que tuvo desde la perspectiva táctica. Partiendo desde la demarcación de “falso” 9, el jugador español tenia la clara misión de generar superioridad numérica en carril central, en especial contra la línea de centrocampistas italianos, conjuntamente con sus compañeros ubicados en el centro del campo español.
Para ello, el jugador español aplico de forma magnifica los fundamentos individuales de: “Ofrecer apoyo entre línea de medios y defensa adversaria” y “Garantizar la construcción del juego saliendo a línea de medios”. Gracias a la aplicación de estos dos fundamentos por parte de Dani Olmo, el conjunto español consiguió lograr el objetivo marcado por Luis Enrique en fase ofensiva.
Además, queremos resaltar la exquisitez en las acciones técnicas que realizó el jugador catalán, que a través de acciones a un contacto, consiguió poner en ventaja a los compañeros ubicados en zona de intervención.
La clave táctica:
La clave táctica del encuentro fue el planteamiento ofensivo que propuso Luis Enrique a través de la figura del “falso” 9. El objetivo de la modificación táctica era:
- Quitar la referencia defensiva a los dos centrales italianos, los cuales se siente muy cómodos cuando tienen a un delantero cercano para defender y referenciar.
- Generar superioridades numéricas en la zona del centro del campo contra los tres centrocampistas italianos.
Además del movimiento explicado a través de la figura de Dani Olmo, el técnico español tenia soluciones ante las posibles variantes italianas para poder contrarrestarlo:
- Si un central por parte de Italia igualaba la situación del 4vs3 por parte de España, el conjunto español potenciaba la figura del 3er hombre, siempre buscando a Pedri u Olmo y su posterior pase frontal a Koke y Busquets.
- En caso de no encontrar al hombre libre en carril central, se potenciaba la aparición de los extremos en zonas intermedias, con el objetivo de seguir generando superioridades numéricas en carril central.
El papel del entrenador:
El entrenador que tuvo un mayor impacto dentro de su equipo fue Luis Enrique. Tal y como hemos explicado en la clave táctica, la incidencia que tuvo el técnico asturiano en el plan de partido a través de las modificaciones tácticas que realizo, fueron brillantes.
Además, la gestión de los cambios por parte “Lucho” fue magnifica, sabiendo qué necesidades tenia el combinado español, en función de la situaciones que se iban produciendo durante el encuentro.
Por ejemplo, la inclusión del Rodrigo en detrimento de Koke, doto a la selección de un mayor equilibrio en las transiciones ataque-defensa, ya que aumento el número de jugadores en la línea compensatoria por detrás del balón en los momentos de perdida del mismo.
Los goles:
En referencia a los goles que pudimos ver durante el encuentro, queremos destacar el gol que consiguió materializar el conjunto dirigido por Luis Enrique.
El gol del empate del conjunto español, fue obra de Álvaro Morata. El jugador de la Juventus de Turin consiguió recibir el balón en el intervalo interlineal, es decir, entre la línea de medios y la línea de defensores del conjunto italiano, para a continuación aplicar el fundamento universal de “buscar una pared para aprovechar un espacio de forma rápida”, que le permitió quedarse solo frente al portero italiano y conseguir batirlo con un magnifico disparo.
